Previous Next

Fratelli Tutti: La Encíclica Social Sobre La Fraternidad

Imprimir

Ratio: 5 / 5

Inicio activadoInicio activadoInicio activadoInicio activadoInicio activado
 

Fratelli Tutti es el título de la nueva encíclica del Papa Francisco. El título de dos palabras en latín proviene de una charla de San Francisco de Asís a sus hermanos Franciscanos: todos hermanos  - Fratelli Tutti. El subtítulo de le la encíclica: Sobre la fraternidad y la amistad social. En esta encíclica, el Papa Francisco habla como un ser humano, un hermano, un creyente in Dios Creador y un seguidor de Cristo, Hijo de Dios y de María, y el Buen Samaritano. El Papa Argentino dirige su tercera encíclica a todos los hombres y mujeres de buena voluntad, a los no creyentes y creyentes, y a los cristianos.

LA ENCÍCLICA FRATELLI TUTTI

Fratello Tutti es una encíclica social y por tanto desarrolla la dimensión social de la vida humana vivida en familia. FT continúa, pone al día y renueva los grandes documentos  de la llamada Doctrine Social de la Iglesia en particular las principales encíclicas sociales como Populorum Progressio (PP), Sollicitudo Rei Socialis (SRS), Deus Caritas Est (DCE), and Laudato Si’ (LS). Y también, y más radicalmente, los documentos del Concilio Vaticano Segundo, sobre todo la Constitución de la Iglesia en el Mundo Moderno Gaudium et Spes (GS). Como todos los documentos del magisterio de la Iglesia, Fratelli Tutti se basa en la Sagrada Escritura y la Tradición Cristiana representada por los Padres de la Iglesia y teólogos clásicos. A estas fuentes, el Papa Francisco añade –como en previos textos suyos- citas  de autores modernos, filósofos, escritores, poetas y artistas. El autor de Fratelli Tutti cita además cartas pastorales de diversas conferencias episcopales regionales y nacionales. El Papa Francisco firmó la encíclica el 3 de octubre, 2020 en la ciudad de Asís. Fue publicada el día siguiente 4 de octubre, la fiesta de San Francisco de Asís. FT se compone de 8 capítulos, desarrollados en 287 números,  que llenan 187 páginas, con 288 notas a pie de página.

            Fratelli Tutti es sin duda una encíclica social importante y relevante para el siglo veintiuno. El Papa cumple el objetivo general que se propuso al escribir esta encíclica: contribuir al desarrollo de una comunidad mundial de fraternidad, basada en la práctica de una amistad socio al servicio del bien común (cf. FT, 154). Verdad básica que  se respira a través de toda la encíclica: todos los seres humanos somos hermanos y hermanas entre sí (Ib. 128). A nivel humano, todos somos hijos e hijas  de la madre tierra (San Francisco de Asís) y a nivel de fe, somos hijos de Dios: todos los humanos somos criaturas de Dios llamadas a ser sus hijos  e hijas (cf. FT 271).

            Las dos ideas principales de FT son la fraternidad y la amistad social. La palabra fraternidad es bien conocida, ya que es el valor y la virtud básica de la vida humana y cristiana. La idea de amistad social es relativamente nueva. Está fundamentada en y requerida por la fraternidad. Además, está directamente conectada con otra idea tradicional del magisterio social de la Iglesia desde el Vaticano Segundo: caridad social (cf. FT 182). El Papa Francisco describe la amistad social como una amistad sin fronteras, apertura universal a todos ya que todos los humanos somos ciudadanos de una nación y del mundo, miembros de la familia humana, y hermanos y hermanas unos de otros (cf. FT 99).

            El programa de  cambio social que propone el Papa con gran convicción, entusiasmo y esperanza parece muy atractivo a nivel teórico. Sin embargo, algunos cuestionan: ¿es la guía del Papa hacia un mundo justo y fraternal  un poco idealista, utópica o, como el mismo Papa dice, “extremadamente irrealista”?  No lo es. El Papa concretiza bien los principios y valores éticos  en general y en las diferentes situaciones sociales, políticas, económicas y culturales, y además presenta  de modo dramático las caras de tantos niños, hombres y mujeres que sufren a nivel personal, familiar y social terribles miserias  en nuestro mundo dividido y terriblemente golpeado por la pandemia causada por el virus Covid-19.

CONTENIDO DE FRATELLI TUTTI

En el primer capítulo de los ocho que componen la encíclica Fratelli Tutti, el Papa Francisco presenta la realidad social en nuestro mundo, una realidad caracterizada por cielos claros pero también por nubes que oscurecen nuestro entorno natural y  el humano. En los siete capítulos siguientes, el Papa se enfrenta esperanzadamente a la realidad social desde una perspectiva humanista, ética y cristiana.  A través de las 187 páginas de FT, su autor busca “un rayo de luz in medio de lo que estamos experimentando” (FT 56).

            El capítulo primero se titula Las sombras de un mundo cerrado. Aquí el Papa presenta la realidad social en nuestro mundo, sus problemas principales y sueños truncados. Obstáculos en el camino hacia un mundo justo y fraternal: individualismo radical, desigualdad social e injusticia, tráfico humano desempleo, desenfrenado consumismo, racismo, intolerancia, nacionalismo cerrado, relativismo, fanatismo, violencia de distintas clases, discriminación, globalización negativa, localismo nacionalista y populismo irresponsable, comunicación digital invasiva y hostil, indiferencia hacia los emigrantes, refugiados, mujeres, pobres y personas mayores (cf. FT 64). Ciertamente hay nubes negras que cubren el cielo de nuestro mundo secular y materialista, pero también se dan muchas  estrellas que iluminan ese cielo  que cubre nuestra sociedad global y  que luchan por desplazar  esas negras nubes del odio, de violencia y  de desigualdad social. FT nos inspira y urge a tratar de conseguir un nuevo mundo entre todos.

            En el capítulo segundo de la encíclica, titulado Un extraño en el camino, el Papa comenta la Parábola de Jesús el Buen Samaritano  (cf. Lk 10:25-37; FT, 56), y  nos invita a todos a ser buenos samaritanos como el buen samaritano de la parábola que se acerca, se compadece y ayuda al hombre gravemente herido en el camino. Nos invita a no ser como aquellos que pasan de largo -como hicieron el sacerdote y el levita de la parábola- ante nuestras hermanas y hermanos gravemente heridos y abandonados en los caminos de la vida.

En el capítulo tercero de FT, el autor reflexiona sobre su título Pensar y gestar un mundo abierto. Aquí el Papa subraya el valor incomparable del amor humano y de la caridad cristiana como distintivo esencial de la naturaleza humana y de la fe cristiana respectivamente. Este valor primordial del amor humano y de la caridad es el alma del compromiso humano y cristiano, un compromiso que nos lleva a acercarnos a todos los otros como miembros de la misma familia humana y como hermanos y hermanas.

            El capítulo cuarto desvela la idea  de Un corazón abierto al mundo entero, que es el título del capítulo. Aquí el Papa Francisco enfatiza un hecho fundamental: todos los humanos pertenecemos a una familia concreta y al mismo tiempo somos miembros de la familia humana universal. En este capítulo de Fratelli Tutti, el Papa se enfrenta al grave problema de los migrantes en nuestro mundo y pide una respuesta global. Se nos describen agudamente los conceptos de globalización y localización para subrayar que un globalismo negativo y un localismo narcisista son obstáculos contra la fraternidad y la amistad social: ambos conceptos -con frecuencia realidades sociales en nuestro mundo- deben ser armonizados y así llegar a ser mutuamente enriquecedores (cf. TF 141-146).  

            En el capítulo quinto, titulado La mejor política, el Papa Francisco critica la corrupción política y subraya que la política es una vocación noble dedicada al servicio del bien común. Trae a colación los principios y valores éticos necesarios que los políticos deben practicar -en realidad, todos los humanos: dignidad humana y derechos humanos, justicia, verdad, libertad, diálogo, solidaridad y subsidiaridad, fraternidad, comunión, compasión y ternura. La práctica de estos principios y valores éticos son el camino que lleva hacia el bien común y la paz social (cf. FT 182). La pandemia causada por el virus Covid-19 ha abierto nuestros ojos para ver nuestra tremenda fragilidad y vulnerabilidad,  y también para convencernos de que la economía de libre mercado no puede resolver todos nuestros problemas. La solución se fundamenta en el respeto a la dignidad humana (cf. FT 168).

            El capítulo sexto, cuyo título es Diálogo y amistad social, se centra en el diálogo social que la humanidad necesita para encaminarnos hacia una cultura nueva: la ética de una cultura nueva  que integre creativamente la pertenencia a una familia concreta y a la familia universal, ya que somos ciudadanos de una nación y ciudadanos del mundo.

El capítulo séptimo, titulado Caminos de reencuentro, se centra en la paz: en la paz social y la paz mundial. La auténtica paz mundial se compone de tres elementos esenciales: verdad, justicia y misericordia(FT 227). El Papa Francisco está profundamente comprometido con lo que él llama el cultivo de una “memoria penitencial”, que implica reconciliación y perdón. En la última parte del capítulo, el Papa reflexiona sobre dos respuestas falsas para conseguir la paz: la guerra y la pena de muerte. Además condena la llamada “deterrence”   -disuadir a otros a través del miedo- y la cadena perpetua, que es “una pena de muerte oculta” (FT 268).

El capítulo octavo se titula Las religiones al servicio de la fraternidad en el mundo. En el último capítulo, el autor de Fratelli Tutti llama a la unidad entre las religiones, que son generalmente –y deben ser siempre- instrumentos de paz, y a combatir todas las clases de violencia.  El Papa Francisco invita a todos los creyentes a tratarse como hermanos y hermanas, y a ser artífices de la paz en el mundo, y “a trabajar juntos por el bien común y la promoción de los pobres” (FT 282). A los cristianos nos urge que contribuyamos a la fraternidad que nuestro Padre Dios nos pide (cf. FT 46). Nuestra fe nos dice que el buen Dios nos da las ayudas, las gracias que necesitamos para actuar como hermanos y hermanas ((cf. FT 203). La Iglesia, la comunidad de los discípulos de Jesús, colabora con otras muchas instituciones y sociedades para promover la fraternidad universal acompañando la vida, sosteniendo la esperanza, trabajando por la unidad, construyendo puentes, destruyendo muros y sembrando semillas de reconciliación. Para los discípulos de Jesucristo, el Evangelio es fuente de fraternidad.  

INVITACIÓN A LA ESPERANZA

A través de las páginas de Fratelli Tutti, el Papa Francisco nos invita a caminar en la esperanza, en una esperanza renovada. Todos nosotros deseamos y anhelamos una vida floreciente, lograda  y feliz, que se consigue  caminando en “la verdad, la bondad y la belleza, la justicia y el amor” (FT 55). Nuestra sociedad global necesita un cambio: un cambio de corazón, de actitud y de estilo de vida. Todos nosotros –hermanos y hermanas- somos parte de la solución de nuestros problemas, y cada uno de nosotros tiene algo que contribuir para crear una bella realidad poliédrica en la que cada uno tiene un lugar.

Finalmente, el Papa Francisco nos llama a renovar nuestra esperanza en un mundo unido y fraternal. A soñar en una sociedad nueva donde nos consideremos y tratemos unos a otros como hermanos y hermanas de verdad. El Papa cierra su  rica encíclica social Fratelli Tutti con etas esperanzadoras palabras: Que Dios inspire ese sueño en cada uno de nosotros.

Nuestra sinopsis de esta gran encíclica social del Papa Francisco Fratelli Tutti es incompleta, breve y un poco fría. Es -así lo esperamos- como un aperitivo antes del plato principal, que es leer toda encíclica. Invitamos a nuestros hermanos y hermanas que no la hayan leído a leerla ¡Merece la pena!

Por Fr. Fausto Gómez, OP.